El 31 de diciembre de 2019, la Comisión Municipal de Salud de Wuhan (provincia de Hubei, China) identificó un nuevo coronavirus, denominado inicialmente 2019nCov, como causante de infección respiratoria en 41 personas que estuvieron en un mercado de animales salvajes.
Es importante entender que con COVID-19 hay más preguntas que respuestas.
En la imagen arriba, es notable la mayoría masculina y militar. La presencia del ministro de la Defensa en contrapunteo con la notable ausencia del ministro de Salud, de mujeres, y de una mayoría médica.
La pandemia del coronavirus ha tomado por sorpresa a muchos, aun cuando había fundadas sospechas de la llegada inminente de una calamidad como la que ocurre en el mundo
Los gobiernos del mundo han anunciado ingentes programas de apoyo para contrarrestar el derrumbe de las economías. Lamentablemente no lo están haciendo bien, porque siguen atrapados en los esquemas convencionales.
Se aprende a ser médico. Durante la formación médica en las universidades se adquieren conocimientos y destrezas, y se aprende que no se tratan “casos”, “camas”, “enfermedades”, sino personas.
En este tiempo de pandemia y sobreinformación, se agradece a cualquier pensador brindar un poco de luz, a fin de entender el sentido de los sucesos.
Cuando cundió el pánico por la aceleración de los contagios del Covid-19, el dilema entre salvar vidas o empleos se resolvió sin mayor dubitación a favor de las vidas.
Es inevitable pensar en gravedades cuando escuchas una estampida de maletas y el edificio donde vives se vacía de un día para el otro.